La formación profesional está experimentando una transformación significativa que deja un impacto positivo en la sociedad. Un claro ejemplo de ello es el proyecto impulsado por el Instituto San José de Badajoz, reconocido como uno de los más innovadores en la VII Convocatoria de Ayudas Dualiza de Caixabank Dualiza y FP Empresa. Bajo el nombre «Residuos solidarios, comunidad y sostenibilidad», esta iniciativa tiene como propósito principal brindar una segunda vida a mobiliario auxiliar, juguetes didácticos y otros enseres de madera por empresas locales, destinándolos posteriormente a entidades sociales.

El origen de esta iniciativa se encuentra en la colaboración del instituto con la carpintería Axis, donde los estudiantes realizan prácticas de Formación Profesional Dual. La relación con esta empresa reveló el desperdicio de madera, que no podían ser reutilizados en sus productos principales. Desde entonces, los estudiantes de los ciclos de Madera y Mueble, específicamente del grado superior de Diseño y Amueblamiento y posteriormente del grado medio de Carpintería y Mueble, desempeñan un papel fundamental. 

Hablamos con el profesor Antonio González-Haba, responsable del proyecto, quien destaca que la participación de los estudiantes no solo beneficia a la comunidad al brindar productos útiles, sino que también asegura una práctica educativa relevante y sostenible.

¿En qué consiste el proyecto «Residuos Solidarios» y cuál fue la inspiración detrás de su concepción?

En primer lugar, poner en contexto la situación de nuestro centro educativo. Estamos situados en una zona de la ciudad de Badajoz con muchas necesidades sociales, y una población con carencias socioeconómicas y culturales y, por otra parte, las industrias de nuestro sector generan una gran cantidad de residuos, que si bien no son aprovechables para la utilización industrial por el pequeño tamaño, sí lo pueden ser para otras funciones. El proyecto básicamente consiste en utilizar los retales de tablero que generan las empresas de carpintería que colaboran con nosotros en la FP Dual, dándoles una segunda vida en forma de muebles auxiliares de pequeño formato (mesillas, estanterías, percheros, relojes, taburetes, mobiliario infantil…) que puedan revertir en la comunidad vecinal de nuestra zona y en juguetes didácticos, material didáctico de lectoescritura y grafología, y mobiliario para los centros escolares y guarderías de nuestro entorno educativo.

¿Quiénes participan activamente en el desarrollo y ejecución del proyecto?

En este proyecto participan los ciclos de nuestra familia profesional CFGS Diseño y Amueblamiento y CFGM Carpintería y mueble, e intentaremos hacerlo extensible al Ciclo de Grado Básico Carpintería y mueble. Empezaremos el trabajo con los alumnos de Grado Superior, que se encargarán del desarrollo de los distintos productos que elaboremos, desde el diseño, planimetría, prototipado y producto final. Una vez tengamos claros los productos a desarrollar, comenzará en una segunda fase la producción de los elementos seleccionados que serán llevados a cabo por todos los alumnos de los ciclos de grado medio y superior. También participa de forma activa la Carpintería AXIS CB, una empresa colaboradora en las prácticas de FP Dual y FCT. Esta empresa se encarga de la selección del material aprovechable, nos lo clasifica y nos lo hace llegar al centro educativo, asimismo colaborará en el desarrollo de los productos que finalmente realizaremos.

¿Cuál es el significado que tiene para el centro educativo y para los estudiantes recibir este reconocimiento?

Nuestro centro educativo es un centro con un marcado ADN en Formación Profesional, es un centro muy activo en todas sus familias (tenemos siete familias profesionales) y concretamente en la nuestra colaboramos con otros centros educativos en la fabricación de mobiliario, participamos en Ferias del sector que se realizan en la institución ferial de Badajoz IFEBA, hemos realizado mobiliario inclusivo para la asociación APAMEX, participamos en el programa Opera Joven de la Diputación de Badajoz, realizando parte de la escenografía, coordinamos  un concurso de fotografía en relación al mundo de la madera y mueble de todos los centros educativos a nivel nacional y más actividades que seguramente se me quedan en el tintero. 

Para nuestro centro educativo, con toda nuestra implicación en la educación de nuestros alumnos, es un orgullo recibir un reconocimiento de este tipo, que nos hace ver y confirmar, que avanzamos en el camino correcto. En cuanto a qué significa para los estudiantes, para ellos es un premio y una motivación extra el ver que los estudios que están realizando y su esfuerzo por aprender se vean reconocidos. Si los motivamos adecuadamente se implican de manera significativa en este tipo de proyectos sociales y es un motivo de estímulo en sus estudios. Esto ya lo pudimos comprobar en fechas no muy lejanas cuando ganamos el proyecto para representar a nuestra asociación PROFEMADERA en el diseño y fabricación del Stand de la asociación en FIMMA-Maderalia 2018.

¿Por qué consideras relevante y necesario reconocer proyectos de alumnado de Formación Profesional de Madera y Mueble?

La nuestra es una Familia Profesional que pasa, podríamos decir, por horas bajas en cuanto a la matriculación, sobre todo en los Grados Superiores. Es una contradicción en cuanto a la gran empleabilidad que tiene; tenemos mucha demanda por parte de las empresas de trabajadores cualificados para las mismas, puestos que no son capaces de cubrir y vemos que no existe una continuidad generacional garantizada. Por tanto, debemos darnos a conocer a todos los estamentos de nuestra sociedad y hacernos visibles en nuestra profesión y que los futuros estudiantes y sus familias conozcan quiénes somos y qué hacemos. 

Por esto creo que el reconocimiento de este tipo de proyectos es muy bueno y necesario para la Formación Profesional, para darnos valor y visibilidad en nuestra sociedad y orientar profesionalmente a los futuros alumnos de Formación Profesional en las distintas posibilidades que ofrece el mundo de la Madera y Mueble.

¿Podrías compartir detalles sobre el futuro de la iniciativa y las entidades sociales con las que colaboraréis?

Una vez que hemos conocido que hemos sido seleccionados como uno de los 47 proyectos elegidos en la presente convocatoria, es poner en marcha el planning de ejecución. Ya llevamos a cabo previamente al conocimiento de la selección, una tormenta de ideas sobre qué materiales podríamos utilizar y qué productos podríamos realizar. En cuanto conocimos que habíamos sido seleccionados, participamos en una reunión de la Comisión Comunitaria de Salud del Barrio para que nos transmitieran sus necesidades para encajarlas dentro de los productos que van a desarrollar nuestros alumnos a lo largo del proyecto. 

Lo hemos querido hacer así para que el trabajo de los alumnos sea una práctica lo más real posible, no realizando solamente productos que “podrían servir para la comunidad”, sino que sabemos que son productos que realmente la comunidad necesita y nos solicita. En cuanto tengamos definidos los productos que podamos realizar, comenzaremos con el desarrollo de los mismos: diseño, prototipado, ejecución de documentación técnica y fabricación de los mismos. Esperamos que este proyecto pueda ser replicado por otros centros educativos de la Familia de Madera y Mueble, y que en nuestro centro tenga continuidad en el tiempo.